viernes, 30 de abril de 2021

TENER HIJOS NO ES UN DERECHO


Artículo publicado en El Día el 30 de abril de 2021

Artículo publicado en La Provincia (Diario de Las Palmas) el 1 de mayo de 2021




Ante la proximidad del Día de la Madre cabe recordar que, de un tiempo a esta parte, la profunda evolución experimentada por el modelo de familia convencional está fuera de toda duda. Como consecuencia, el ejercicio de la maternidad y la paternidad también se ha modificado con la entrada en escena de métodos como la inseminación artificial, la fecundación “in vitro” o el alquiler de vientres. Y cuestiones tan delicadas como la que nos ocupa confirman la teoría de que el Derecho encuentra su razón de ser en la necesidad de regular determinados aspectos de la vida que, en ocasiones, son fruto de una frenética evolución de la sociedad. Por lo tanto, es lógico que la ciencia jurídica vaya siempre un paso por detrás de esos acontecimientos susceptibles de ser legislados. Las materias relativas a la reproducción, evidentemente, tampoco están exentas. 

El avance tecnológico resulta imparable y, desde que en 1978 nació la primera bebé-probeta, millones de personas han venido al mundo a través de estos tratamientos. Simultáneamente, ha tomado fuerza la, a mi juicio, rechazable opción de la mujer que alquila su vientre para entregar su fruto a quien ha pagado por él. De hecho, no somos pocos los juristas que consideramos que estos supuestos implican pactos de contenido inmoral. El alquiler de úteros, posibilidad cada vez más demandada y, por ende, más ofertada incluso a través de “ferias” comerciales, es ilegal en la práctica totalidad de los países del mundo, incluido el nuestro. Por lo tanto, a día de hoy, quienes escogen esta vía para concebir saben que lo hacen al margen de la ley. 

El Parlamento Europeo, en su resolución de 17 de diciembre de 2015, condenó abiertamente esta práctica por resultar contraria “a la dignidad humana de la mujer, ya que su cuerpo y sus funciones reproductivas se utilizan como una materia prima. Estima que debe prohibirse esta práctica, que implica la explotación de las funciones reproductivas y la utilización del cuerpo con fines financieros o de otro tipo, en particular en el caso de las mujeres vulnerables en los países en desarrollo, y pide que se examine con carácter de urgencia en el marco de los instrumentos de Derechos Humanos”. Asimismo, el artículo 10 de la Ley 14/2006, de 26 de mayo, sobre técnicas de reproducción humana asistida establece que “será nulo de pleno derecho el contrato por el que se convenga la gestación, con o sin precio, a cargo de una mujer que renuncia a la filiación materna a favor del contratante o de un tercero”. 

Igualmente el Tribunal Supremo español se pronuncia en contra de esta práctica, afirmando que en “nuestro ordenamiento jurídico y en el de la mayoría de los países con ordenamientos basados en similares principios y valores, no se acepta que la generalización de la adopción, incluso internacional, y los avances en las técnicas de reproducción humana asistida vulneren la dignidad de la mujer gestante y del niño, mercantilizando la gestación y la filiación, “cosificando” a la mujer gestante y al niño, permitiendo a determinados intermediarios realizar negocio con ellos, posibilitando la explotación del estado de necesidad en que se encuentran mujeres jóvenes en situación de pobreza y creando una especie de “ciudadanía censitaria” en la que solo quienes disponen de elevados recursos económicos pueden establecer relaciones paterno-filiales vedadas a la mayoría de la población”. 

La pregunta radica todavía en si es razonable pretender que las leyes aprobadas en España tengan verdadera eficacia general y no sólo sean de aplicación para quienes, por carecer de recursos, no puedan sortearlas allende nuestras fronteras. Y, honestamente, la respuesta ha de ser afirmativa. Tener hijos no es un derecho, por más que a muchos hombres y mujeres les resulte un trance extremadamente amargo y doloroso encajar esta realidad. Nunca los deseos, por muy nobles que parezcan, deben cumplirse a costa de los derechos de terceras personas.

lunes, 26 de abril de 2021

OSCARS 2021 (Academy Awards 2021)





LISTADO COMPLETO DE GANADORES 


Mejor película: Nomadland 

Mejor dirección: Chloé Zhao – Nomadland  

Mejor actriz protagonista: Frances McDormand – Nomadland 

Mejor actor protagonista: Anthony Hopkins - El padre  

Mejor actriz de reparto: Yuh-Jung Youn – Minari 

Mejor actor de reparto: Daniel Kaluuya - Judas y el mesías negro 

Mejor guion original: Emerald Fennell - Promising Young Woman (Una joven prometedora) 

Mejor guion adaptado: Christopher Hampton, Florian Zeller - El padre 

Mejor película internacional: Another Round (Otra ronda) – Dinamarca 

Mejor película animada: Soul - Dana Murray y Pete Docter 

Mejor largometraje documental: My Octopus Teacher - Pippa Ehrlich, James Reed y Craig Foster 

Mejor dirección de fotografía: Erik Messerschmidt – Mank 

Mejor diseño de producción: Donald Graham Burt y Jan Pascale – Mank 

Mejor banda sonora: Soul - Trent Reznor, Atticus Ross y Jon Batiste 

Mejor canción original: Fight for You, de Judas y el mesías negro - H.E.R., Dernst Emile II y Tiara Thomas 

Mejor edición: Mikkel E.G. Nielsen - El sonido del metal 

Mejor maquillaje y peluquería: Sergio López Rivera, Mia Neal y Jamika Wilson - La madre del blues 

Mejor vestuario: Ann Roth - La madre del blues 

Mejor sonido: Nicolas Becker, Jaime Baksht, Michelle Couttolenc, Carlos Cortés y Phillip Blath - El sonido del metal  

Mejor corto de acción: Two Distant Strangers - Travon Free y Martin Desmond Roe 

Mejor corto animado: If Anything Happens I Love You - Will McCormack y Michael Govier 

Mejor corto documental: Colette - Anthony Giacchino y Alice Doyard 

Mejores efectos visuales: Tenet - Andrew Jackson, David Lee, Andrew Lockley y Scott Fisher


-EN COLABORACIÓN CON EL BLOG "CINE EN PANTALLA GRANDE"-

viernes, 23 de abril de 2021

"LA MALDAD EXISTE"


Artículo publicado en El Día el 23 de abril de 2021

Artículo publicado en La Provincia (Diario de Las Palmas) el 24 de abril de 2021

Artículo publicado en Faro de Vigo el 1 de mayo de 2021




Cada vez que asisto a noticias sobre crímenes espeluznantes como el de la niña de trece años violada y asesinada por su vecino (en cuyo alegato final del juicio, la fiscal ha afirmado textualmente que “la maldad existe y este es un caso de ello”), me asalta idéntica mezcla de sensaciones, que van desde el estupor más profundo a la impotencia más paralizante. Antes solía añadir una más, que era mi absoluta incapacidad para comprender actuaciones de este tipo. Ahora ya no trato de encontrarles una explicación, porque de sobra sé que no la hay. Y conste que mi postura no obedece a ningún embrutecimiento de mi personalidad. Se debe únicamente a que mi más de medio siglo ya vivido, sumado a mi experiencia profesional en el ámbito del Derecho, me han demostrado que ese “lado oscuro de la fuerza” que antes me resistía a aceptar, ese “mal” que desterraba exclusivamente para la ficción, ese extravío inexplicable que prefería achacar a una enfermedad mental, existe por sí solo. 

A la mayor parte de las personas nos cuesta admitir que no todo tiene una respuesta razonable. Nos supera aceptar el hecho de que entre nosotros hay gente mala que no padece ninguna patología física ni psíquica. Mala, sin más. Mala porque sí. Es durísimo asumir la maldad por la maldad. Y más aún lo es constatar que afecta a cualquier edad, género y condición. Es precisamente esa incapacidad de comprensión del fenómeno la que impulsa a no pocos legisladores, hombres y mujeres de carne y hueso elegidos en las urnas para representar a la ciudadanía en su conjunto, a negarse a elaborar normas adaptadas a la realidad desnuda. En otras palabras, a regular nuestro mundo tal y como es, no tal y como lo ven o, peor todavía, tal y como les gustaría que fuera. 

No hace falta ser jurista para saber que las penas asociadas a una vulneración de la ley deben cumplir una triple finalidad. La primera, castigar el hecho cometido aspirando a la rehabilitación de infractor. La segunda, servir de aviso al resto de los posibles infractores, a fin de que se abstengan de reproducir el mismo acto si, al menos, no quieren exponerse a sufrir idénticas consecuencias. Y la tercera, absolutamente ineludible, proteger a toda la sociedad de una serie de individuos que, por una u otra circunstancia, la perjudican, la atemorizan y ponen en peligro su exigible coexistencia pacífica y cívica. Nadie que me conozca podrá reprocharme que no defienda la reinserción de los condenados, ni acusarme de abogar por un modelo penitenciario represor al margen de las garantías jurídicas, ni censurarme por no demostrar la mejor voluntad en todo lo relacionado con estas materias. 

Ni que decir tiene que soy detractora absoluta de la pena de muerte. Sin embargo, sostengo la opinión de que determinados comportamientos deben castigarse con dureza, evitando manifiestas zonas de impunidad de sobra conocidas incluso por los propios autores de los hechos. Cada vez que un terrorífico caso nos sacude las entrañas, no faltan responsables políticos que se aferren a la idea de que las reformas legislativas no deben abordarse en caliente, y yo me suelo preguntar cuál considerarán la temperatura más recomendable, porque nunca la acaban de concretar. Por desgracia, estas atrocidades no se cometen exclusivamente en la adultez. Basta abrir los ojos y los oídos para concluir que un significativo porcentaje de la infancia y la juventud actuales presentan una escasa tolerancia a la frustración y una notable carencia de autodominio. 

Por lo tanto, ya que el grado de violencia social no parece admitir discusión, es preciso recordar una y otra vez que la vida es sagrada y la convivencia, imprescindible. Lástima que el mensaje que a menudo se nos traslada es que actuar mal sale demasiado barato, porque así no vamos a ninguna parte.

miércoles, 21 de abril de 2021

MONARQUÍA VS. REPÚBLICA






Mañana jueves, 22 de abril, tendrá lugar este interesantísimo debate en el que, desde una perspectiva estrictamente jurídica y técnica, el experto en la materia Gerardo Pérez Sánchez ejercerá como moderador e introductor de las cuestiones a tratar, junto a los catedráticos de Derecho Constitucional Roberto Blanco Valdés y Juan Fernando López Aguilar. 

Se abordarán, entre otros aspectos, la inviolabilidad de la Jefatura del Estado, la revisión del Título II de la Constitución (relativo a la Corona) y la posibilidad de eliminar la primacía del varón sobre la mujer en la sucesión al trono.

Se adjunta a continuación el enlace de la noticia:

https://www.eldia.es/canarias/2021/04/20/profesores-derecho-constitucional-debaten-monarquia-48494527.html

viernes, 16 de abril de 2021

INFIERNO EN LA PLAYA


Artículo publicado en El Día el 16 de abril de 2021





A medida que se acerca el ansiado fin de semana, miles de santacruceros sueñan con escaparse unas horas a alguna de las playas del municipio, preferiblemente la de Las Teresitas, a pesar de que la criticable gestión de los políticos isleños ha condenado a este maravilloso enclave natural a la penosa situación en la que se encuentra y que, salvo milagro, tiene visos de eternizarse. Como ocurre año tras año, con la inminente llegada del buen tiempo se producen unos monumentales atascos, por más que se advierta a los futuros bañistas de las medidas necesarias y oportunas para garantizar la fluidez de la circulación de los vehículos que acceden al recinto playero, entre las que a veces se halla el cierre de la entrada al mismo en cuanto se completan sus plazas de aparcamiento. 

Recuerdo que, en su momento, la alternativa ofrecida por la autoridad competente pasaba por utilizar la guagua y aplicar descuentos a aquellos usuarios que dejaran sus coches en el Intercambiador, de tal manera que quienes optasen por esa alternativa podrían llegar al ansiado destino sin necesidad de madrugar y, además, evitarían una más que probable lipotimia colectiva, resultante de pasar una eternidad atascados dentro de un horno de cuatro ruedas para recorrer la distancia existente entre Valleseco y San Andrés. Pero, como el hombre es el único animal que tropieza dos veces en la misma piedra, al sábado le sigue el domingo y, con él, otra nueva posibilidad de cometer un error similar al de la víspera. 

Así que, como quiera que la apuesta por el transporte público sigue siendo una quimera, los conductores emprenden volante en mano la paradisíaca ruta que atraviesa el Parque Rural de Anaga. Cambian la arena blanca por la negra y el palmeral por los roques para, decenas de curvas después, vislumbrar en lontananza la espectacular belleza de Almáciga, persuadidos de que la jornada dominical resultará inolvidable. Y seguramente acertarán porque, a juzgar por las imágenes que proliferan en medios de comunicación y redes sociales, a ambos lados de la carretera se continúan alineando decenas de utilitarios y camionetas que obstaculizan el tránsito, formando una especie de campamento espontáneo colonizado por decenas de individuos incapaces de adaptarse a unas mínimas normas de convivencia y que se dedican a atemorizar a cualquier vecino o forastero que ose censurar su permanente burla a la legalidad, amparados en que no existe ninguna señal que les impida montar sus chiringuitos en los arcenes. 

No sé cómo será ahora, pero recuerdo perfectamente cómo era antes, porque lo comprobé una vez en mis propias carnes. La única vez, naturalmente. La espeluznante visión incluía a un gritón de aspecto disuasorio, poseedor de una furgoneta con toldo multiusos a cuyo amparo se amontonaban la colchoneta para siestas diurnas y sueños nocturnos, un infiernillo donde calentar los ranchos correspondientes, una cuerda atada a dos varillas para colgar bañadores y vestimentas varias, un reproductor de música estridente y un barreño para poner la vajilla en remojo. Ni el mismísimo Dante hubiera imaginado un averno más estremecedor, a no ser que, huyendo de los perros peligrosos sin bozal cuyos dueños presumen de ser los amos de la naturaleza, se hubiera aventurado también a acercarse a la orilla del océano sorteando los excrementos humanos que adornaban el sendero. 

Yo pensaba que, si aquel escenario hubiera variado sustancialmente, algún alma caritativa de entre mis amigos y conocidos me informaría, por aquello de reconsiderar mi postura. Pero, después de ver las recientes imágenes de prensa, a mí no me pillarán por esos lares. Más lo siento por los vecinos, comerciantes y hosteleros de la zona, que no se merecen semejante maltrato. Es increíble que nuestros representantes sean incapaces de arbitrar una solución para que estos lamentables escenarios no se reproduzcan temporada tras temporada, habida cuenta el grave riesgo que comportan. Lástima de Reserva Mundial de la Biosfera.

martes, 13 de abril de 2021

UNA RADIO CERCANA Y PARTICIPATIVA




Ya de vuelta a los estudios de RTVC tras unas jornadas de necesario descanso, ha sido un placer reencontrarme con mis compañeros Mercedes Martín y Eugenio González para, desde el programa “Tarde o temprano”, seguir “contando la vida” a nuestros fieles oyentes. 

Radio cercana y participativa que comparto como colofón a otra semana plena de actividad comunicadora (a partir del minuto 6 del enlace de audio adjunto).


http://www.rtvc.es/canariasradio/multimedia/Tarde%20o%20Temprano-14331/08-04-21-152.aspx?fbclid=IwAR1mD6NwRlOZ2J2cAX7IcSITWQaDtsvPwzXjunYuMHyaNzZnP75NMYlP1HA#.YHRrEtXwZz9


viernes, 9 de abril de 2021

LOS EUFEMISMOS COMO ESCAPATORIA


Artículo publicado en El Día el 9 de abril de 2021

Artículo publicado en La Provincia (Diario de Las Palmas) el 10 de abril de 2021

Artículo publicado en Diario de Mallorca el 15 de abril de 2021

Artículo publicado en Diario de Ibiza el 17 de abril de 2021





Desde hace ya lustros me asalta la sensación de padecer una enfermedad crónica que, desgraciadamente, aqueja a toda la ciudadanía: la pretensión de que la ficción supere a la realidad. Vano intento, si tenemos en cuenta que la realidad es extremadamente tozuda y, cuando se decide a hacer acto de presencia, no nos deja más salida que la rendición. Cada vez me conmueve más esa capacidad infinita de los seres humanos para intentar huir de los problemas y tratar de evitar lo desagradable, necia carrera hacia un imposible para la que no nos duelen prendas. 

Para ello, el primer paso consiste en no llamar a las cosas por su nombre, como si así poseyéramos el don de su transformación y la facultad de convertirlas en lo que no son. Hay que reconocer que nuestra verdadera maestría en el autoengaño y, para ganar esta batalla, los eufemismos se revelan como nuestros mejores aliados. Se trata de términos menos ofensivos y más aceptables, llamados a sustituir a otros que, por el contrario, sugieren ideas negativas o provocan sentimientos poco gratos. Algunos pretenden, aunque con escaso éxito, resultar cómicos. Otros, directamente, nos desorientan, nos evaden o nos tornan inconscientes de una verdad cruda y amarga. 

En ocasiones, sustituyen a conceptos considerados tabúes o, cuando menos, molestos para determinados segmentos de la población. De ahí que disfruten de gran predicamento entre los hablantes del politiqués, ese idioma con el que tantos cargos públicos nos castigan a diario. En definitiva, se alzan como un incuestionable instrumento de manipulación del lenguaje para facilitar la aceptación generalizada de planteamientos que, expuestos de otro modo, resultarían reprobables. Sobra decir que estas figuras retóricas cumplen su finalidad a la perfección y no hay ámbito que se les resista en su particular cruzada contra el lado oscuro de la fuerza. Nos mantienen en la firme decisión de marginar de nuestra existencia todo aquello que desentone con la idea de perfección comúnmente aceptada: la que se asocia a juventud, belleza, salud y riqueza. 

En nuestro mundo ficticio ya no existen viejos, sino personas entradas en años. Nadie se muere. Se limita a pasar a mejor vida. Además, nunca es por culpa de un cáncer, sino de una larga y penosa enfermedad. Los despidos son regulaciones de empleo y los inevitables insultos asociados, agresiones verbales. Quienes cometen un delito no dan con sus huesos en la cárcel. Permanecen en establecimientos penitenciarios donde no conviven con otros presos, sino con otros internos. Circunstancia similar sucede con la vejez, denominada ahora Tercera Edad, y cuyos representantes ya no ven discurrir sus días en geriátricos, sino en residencias. Los suicidas han pasado a ser difuntos por voluntad propia. Ya no existen prostitutas, sino profesionales del sexo. Tampoco suegras, sino madres políticas. Ni negros, sino hombres de color, aunque ese color sea el negro. 

Las guerras son intervenciones militares, los terroristas, activistas y la tortura, un método de persuasión. Las víctimas civiles de cualquier carnicería se reducen a meros daños colaterales por obra y gracia de las estadísticas de los Ministerios de Defensa. Las mujeres gruesas son señoras entradas en carnes y jamás van al retrete, sino al servicio. Los alumnos que martirizan a sus profesores no son expulsados de clase, sino excluidos temporalmente de las aulas. Los telespectadores no reprueban la sobredosis de mediocridad de la programación de sobremesa, ni los radioyentes reniegan de los tertulianos incapaces de debatir sin vociferar. En todo caso, padecen alteraciones de la percepción. Y las brutales crisis que cíclicamente nos atenazan, no son sino el enésimo período de crecimiento negativo de la economía. Tal vez un proyecto llamado al éxito sería la elaboración de un diccionario Ficción-Realidad/Realidad-Ficción, una suerte de herramienta definitiva para recordarnos que el culo se ha transmutado en glúteos y la basura en residuos sólidos urbanos. Qué menos que prestarle digno acomodo a esta lista de vocablos que llega ya hasta el infinito.

lunes, 5 de abril de 2021

DE NUEVO A PLENO RENDIMIENTO






Ya de nuevo a pleno rendimiento, comparto el enlace de audio con la emisión de marzo correspondiente a mi segunda temporada de colaboración con la emisora Candelaria Radio. 

De la mano de la periodista Sofía Ramos y dentro del programa “Cuéntame”, los últimos jueves de cada mes realizo un repaso de mis artículos de opinión publicados en los medios de la Editorial Prensa Ibérica -El Día, La Provincia (Diario de Las Palmas), Faro de Vigo, La Nueva España, Diario de Mallorca, Diario de Levante, Información de Alicante, Diario de Ibiza…- y que también pueden consultarse en mi blog “Lo que muchos piensan pero pocos dicen”. 

Eternamente agradecida por este privilegio de comunicar desde la libertad y el respeto. 


https://go.ivoox.com/rf/67691400