lunes, 6 de octubre de 2014

"EUROPA INESPERADA"










El pasado viernes 3 de octubre respondí a la invitación cursada por mi compañero del Coro Adulto de la Escuela de Música de Santa Cruz de Tenerife, Dámaso Ávila, para asistir al acto de inauguración de su exposición de fotografías “Europa inesperada”. Desde las páginas de este blog animo a todas aquellas personas que se encuentren en la isla del Teide durante el presente mes de octubre a que se desplacen a la Sala de Arte de la Casa de los Capitanes Generales de La Laguna, un histórico edificio anexo al del precioso Ayuntamiento de la ciudad, para disfrutar de la maestría y sensibilidad de este hombre polifacético con quien comparto el amor por la música.
La muestra se compone de cuarenta y cinco obras con distintos formatos y diversos tamaños y su título alude a la mezcla de imágenes de arquitectura, paisajes y retratos que el autor ha ido recogiendo a través de su lente por trece países del Viejo Continente: Francia, Noruega, Finlandia, Suecia, Malta, Bélgica, Holanda, Dinamarca, Italia, Austria, Alemania, Suiza y Estonia.
Ha sido financiada en parte mediante la novedosa vía del micromecenazgo (Crowfunding), gracias a las aportaciones económicas de más de cincuenta mecenas.
Ávila ha logrado transmitir a los espectadores una visión diferente de los entornos que ha recorrido, una mirada con vocación de adentrarse en el universo de la creatividad fotográfica para impactar y para, sin duda alguna, conmover.
Resulta particularmente acertado el énfasis que imprime en los “retratos con carácter” de algunos de los ciudadanos que han llamado poderosamente su atención y que se alzan como el mejor instrumento para que nos demuestre su talento sobresaliente con la cámara.
En palabras del también tenor, “el fotógrafo no es siempre un notario de la realidad sino que, a través de sus imágenes, manifiesta un afán creador de emociones. Mis fotografías intentan expresar una forma muy particular de ver y convertir los momentos de mi existencia en instantes casi mágicos”.
En ese caso, enhorabuena, compañero. Lo has conseguido. Gracias por transportarme en el espacio y en el tiempo a algunos de esos territorios que, por suerte, también he visitado y en los que he sido muy feliz.
Mucha suerte en esta aventura y en cuantas emprendas en el futuro.



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