Supongo
que todos los enamorados de las letras nos preguntamos qué razón nos impulsa a
situarnos frente a la página en blanco y comenzar a llenarla de palabras.
En
mi caso particular, defiendo la teoría de que escribir es un modo (uno más) de
sobrevivir, una especie de terapia espiritual sustitutiva.
Por
eso, leo de vez en cuando el magnífico discurso de Mario Vargas Llosa en la
entrega de su Premio Nobel de Literatura y centro mi atención en los párrafos
que quiero compartir en este foro, con la esperanza de que muchas personas se
sientan tan identificadas con su contenido como yo misma.
Los
libros son una fuente de inmensa felicidad.
LA LITERATURA ES UNA REPRESENTACIÓN FALAZ DE LA VIDA QUE,
SIN EMBARGO, NOS AYUDA A ENTENDERLA MEJOR, A ORIENTARNOS POR EL LABERINTO EN EL
QUE NACIMOS, TRANSCURRIMOS Y MORIMOS. ELLA NOS DESAGRAVIA DE LOS REVESES Y
FRUSTRACIONES QUE NOS INFLIGE LA VIDA VERDADERA Y GRACIAS A ELLA DESCIFRAMOS,
AL MENOS PARCIALMENTE, EL JEROGLÍFICO QUE SUELE SER LA EXISTENCIA PARA LA GRAN
MAYORÍA DE LOS SERES HUMANOS, PRINCIPALMENTE AQUELLOS QUE ALENTAMOS MÁS DUDAS
QUE CERTEZAS, Y CONFESAMOS NUESTRA PERPLEJIDAD ANTE TEMAS COMO LA
TRASCENDENCIA, EL DESTINO INDIVIDUAL Y COLECTIVO, EL ALMA, EL SENTIDO O EL
SINSENTIDO DE LA HISTORIA, EL MÁS ACÁ Y EL MÁS ALLÁ DEL CONOCIMIENTO RACIONAL.
NADA HA SEMBRADO TANTO LA INQUIETUD, REMOVIDO TANTO LA
IMAGINACIÓN Y LOS DESEOS, COMO ESA VIDA DE MENTIRAS QUE AÑADIMOS A LA QUE
TENEMOS GRACIAS A LA LITERATURA PARA PROTAGONIZAR LAS GRANDES AVENTURAS, LAS
GRANDES PASIONES, QUE LA VIDA VERDADERA NUNCA NOS DARÁ. LAS MENTIRAS DE LA
LITERATURA SE VUELVEN VERDADES A TRAVÉS DE NOSOTROS, LOS LECTORES
TRANSFORMADOS, CONTAMINADOS DE ANHELOS Y, POR CULPA DE LA FICCIÓN, EN
PERMANENTE ENTREDICHO CON LA MEDIOCRE REALIDAD.
POR ESO TENEMOS QUE SEGUIR SOÑANDO, LEYENDO Y
ESCRIBIENDO, LA MÁS EFICAZ MANERA QUE HAYAMOS ENCONTRADO DE ALIVIAR NUESTRA
CONDICIÓN PERECEDERA, DE DERROTAR A LA CARCOMA DEL TIEMPO Y DE CONVERTIR EN
POSIBLE LO IMPOSIBLE.
Mario Vargas Llosa
No hay comentarios:
Publicar un comentario